Pesca de la Dorada

Pesca de la dorada. Es una de las más bellas maneras de pasar un fin de semana.
    El cuerpo de la dorada es ovalado y comprimido, su cabeza recuerda una expresión enojada, los labios son gruesos y tiene una mandíbula muy fuerte con la que practicamente lo tritura todo. La cola es ancha, lo que le permite una natación a gran velocidad. La coloración del cuerpo es plateada, aunque su principal característica es una mancha de color dorado-rojizo en su frente por encima de los ojos, lo que la hace inconfundible.

    Es un pez que vive preferentemente a lo largo de las costas, normalmente prefiere lugares donde roca y vegetación se mezclen. Podremos verlas en las desembocaduras de los ríos en los meses de Primavera y Verano, donde las aguas (dulce y salada) se mezclan, en Otoño se retiran de estas zonas y buscan aguas mas tranquilas y recogidas. Permanece en zonas de entre pocos centímetros y cuarenta metros de profundidad. Su tamaño puede llegar a los 80 centímetros de longitud y los 5 kilos de peso. Es un pez carnívoro y se alimenta casi exclusivamente de moluscos y crustáceos.

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    La pesca desde las orillas arenosas y de piedras se practica a fondo, lanzando el cebo lejos del romper de las olas. Para esta técnica es preferible todos los moluscos, por ejemplo almejas, mejillones y navajas, que están incluidas en su dieta principal. Pueden usarse varias cañas (por normativa 2 máximo), fuertes y de longitud no inferior a 3,5 metros, con las que se pueden efectuar buenos lanzados. Los carretes de mar, con elevada capacidad de hilo y una buena recuperación. El espesor de la línea madre (linea desde el plomo hasta el carrete), oscilará entre el 0,30 y el 0,40 aunque yo me quedaría con el primero ya que al ser menos pesado permite una lanzado mucho mayor. Al final de la linea madre pasaremos un plomo entre 25 y 100 gramos terminado en un esmerillón o mosquetón así el plomo quedará corredero y si la Dorada pica no sentirá el peso del plomo. Si estamos en zona de proximidad de rocas, os aconsejo que utilicéis uno de los plomos de la foto1. El de varilla y el de aleta van muy bien pero para esta pesca en especial me quedo con el de aleta, ya que este lleva un plástico que al recoger, hace rebotar la línea y es más difícil que se enroque, además las alas faborecen un buen lance. Después ataremos al mosquetón un bajo de línea, que oscilará entre los 25 y 50 centímetros dependiendo de si hay fuerte o poco oleaje respectívamente, terminado en un buen anzuelo del 1. Si hay rocas sumergidas los cebos que dan mejor resultado son el mejillón, las quisquillas, los hemitaños y los gusanos de roca, en cambio en zonas arenosas, son más eficaces las navajas, almejas y los gusanos de mar (lombriz de arena, coreana, americana, tita,etc).